De los expertos de FORMA ARQUITECTÓNICA S.A. DE C.V. traemos para ti en este libro de ideas algunos espacios remodelados en una residencia ubicada en Atizapán de Zaragoza. El trabajo de interiorismo se basó en un concepto campirano rústico pero al mismo tiempo moderno, dando prioridad a la funcionalidad del espacio así como a la generación de sensaciones confortables, amables y familiares.
Los espacios intervenidos fueron la estancia, la cocina, el cuarto de baño, la terraza y una habitación que se convirtió en un bar con cava ¡encantador!
Te invitamos a conocer cada espacio y a inspirarte, tomar ideas y ponerte en contacto con los profesionales para hacer realidad ese proyecto con el que has soñado.
La estancia luce sumamente organizada, con un escenario blanco sobre un lienzo azul añil que le da un toque lúdico increíble.
A este espacio se le integró un organizador construido sobre el muro principal a base de tablarroca y pasta, para darle un acabado perfecto. Por otro lado, el piso es de concreto pulido y el tono azul es pintura de esmalte. Podemos ver que cuenta con mucha luz natural y la altura del sitio crea una sensación de amplitud maravillosa.
En esta habitación se integró un lugar especial: una cava y un bar para compartir, con un estilo rústico genial ¡y encantador!
El secreto de este diseño consiste en que está lleno de detalles:
Podemos ver el estilo rústico y campirano en la cocina, ¡en su totalidad! Los muros se rediseñaron con ladrillos o tabiques aparentes, pero estos no se instalaron sino que se rescataron de la construcción original, restaurándose con pigmentos naturales.
El equipo de la cocina se incorporó en acero inoxidable de alta calidad, lo que le da un toque moderno e industrial. Algunos de los muebles fueron restaurados a base de cardados y patinados, y los muebles de la cocina, alacenas y gabinetes, se construyeron con madera de álamo y se integró una cuadrícula para las especias.
Al cuarto de baño se le integró un hermoso remate visual en el muro final con piedra de río. La meseta donde se ubica el ovalin se realizó con acabado cardado. En el piso se instaló loseta cerámica con apariencia de madera y los muros se revistieron con pasta para un acabado perfecto. Los corazones le dan un toque encantador.
En el exterior se rediseñó el espacio destinado a la terraza. Aquí se integraron dos chimeneas, la cubierta se restauró con plafón de carrizo y se construyó con una retícula de aluminio.
El piso se hizo con cuarterón de barro, reiterando el estilo de toda la residencia. Sin duda, la intervención le ha dado a esta casa un sentido más amigable, familiar y confortable bajo una atmósfera cálida y campirana.
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