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Hoy te mostramos una casa de madera muy cómoda y original. Se ubica en Chile en un entorno envidiable. La propuesta se destaca por contrastes notables entre interior y exterior, que prioriza la integración de los espacios interiores con el contexto. Esa característica lo logra a través de grandes ventanales que producen una gran calidad en las diferentes áreas de la vivienda. La madera en acabado negro mate y aparente es la protagonista en fachadas. En tanto el hormigón y el cemento lo son hacia el interior del proyecto que se desarrolla en un gran volumen que diferencia muy bien las áreas sociales de las privadas, gracias al diseño en los espacios que se reflejan en la fachada posterior.
Kimche Arquitectos es una empresa originaria de la Comuna de Pichilemu. Sus propuestas se caracterizan por su gran profesionalidad y calidad. Con gran experiencia su portafolio incluye proyectos residenciales y turísticos.
La fachada de acceso recibe al visitante con una interesante propuesta en un material con dos lenguajes diferentes: por un lado, la madera acabada en negro mate como base del proyecto y por el otro, la madera en su estado natural a través de unos troncos delgados que se colocan generando una pantalla de irregular naturalidad.
La fachada posterior se distingue principalmente de la fachada de acceso por ser completamente abierta. Grandes ventanales abren todos los espacios interiores a dialogar con las vistas. Con paneles de madera en acabado natural, este alzado se encuentra delineado por la cubierta y los muros perimetrales que se destacan por estar acabados en el negro mate del resto de las fachadas.
La fachada principal está diseñada en un cuerpo seccionado en dos partes. Dicha sección se acentúa subiendo el nivel de una de las cubiertas. Aprovechando este recurso de diseño se generó la puerta de acceso principal, que además de enmarcarse por la ranura que divide la geometría general, se destaca por encontrarse remetida del primer plano.
Un pasillo interior produce una perspectiva fugada que, por las dimensiones de dicha circulación y la diferencia de acabados entre el blanco de muros y cielo y el gris del piso, se acentúa más. Las puertas en madera natural a ambos flancos del corredor interrumpen en diferentes intervalos la continuidad de la terminación de los muros. Las luminarias en blanco se pierden al centro del plafón.
El acabado en hormigón enduelado aparente del interior junto al cemento afinado en piso, producen una arquitectura de estilo minimalista que es perfecta para dar prioridad al entorno en el que se desplanta la vivienda. El gran ventanal se delinea por su contorno que contrasta del resto de las terminaciones.
El espacio principal dedicado a las zonas sociales de la vivienda es súper amplio. Esta amplitud se ve acentuada por la gran cantidad de luz que llega del exterior por todas las ventanas y ventanales que delimitan el espacio. Además los acabados interiores en colores claros y el desnivel que se propuso entre la sala y el comedor otorgan mucha generosidad espacial.
El baño se diseñó de manera modesta para priorizar los espacios de mayor jerarquía. La principal diferencia la dan los acabados en porcelánicos gris oscuro en muros que combinan con el cemento del piso y las pequeñas ventanas para iluminar y ventilar dichos espacios.
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