Los 7 errores más comunes al decorar la recámara ¡y cómo corregirlos!

Xóchitl Díaz Xóchitl Díaz
Каменный лофт, CO:interior CO:interior Quartos industriais
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¡Deben parar ahora!, nos referimos a los errores, muy frecuentes, que se cometen cuando el momento de embellecer la recámara, habitación diseñada por excelencia para el descanso,  y que llega a ocupar primacía en tu tiempo y creatividad.

Lo que pasa, y que hace tan usuales a estos desaciertos, es que en muchas ocasiones nos conformamos con algo que representa inmediatez y practicidad, pues ahorramos de nuestro tiempo y energía. El problema no es éste, ya que en efecto, algunas soluciones debe ser así de rápidas, puesto que no merecen mayores complicaciones que aceptar lo que está más a la mano, como se dice coloquialmente.

Pero en otras circunstancias, como es la decoración, cada detalle será útil para denotar una apariencia bella, por lo que, si elegimos algo que no esté a la medida, saturamos un mueble, e incluso  si elegimos un adorno que no está del todo bien, estamos atentando con el precepto de decorar de la mejor manera.

Bajo esta idea es que hemos hecho una pequeña pero eficaz lista, con algunas cosas que debes evitar cuando estás volviendo única tu alcoba, ¿las quieres conocer?, entonces comencemos el recorrido donde los errores serán al mismo tiempo las herramientas, te diremos como corregirlos ¿Listo? ¡Toma nota!

1. Elegir el cubrecamas correcto

Comencemos por la protagonista de la recámara: la confortante y esponjosa cama, y es que puede faltar cualquier cosa menos este mueble, por ello, todo lo relacionado con ella adquiere suma importancia. Al decir que todo lo referente a ella, estamos hablando, entre esta gama de cosas que pueden tener relación, del cubrecamas, edredón, colcha o como lo conozcas, o le quieras llamar.

El error aquí entonces, radica en su elección. Quizá al principio suene raro, pero es un errata sumamente común. En múltiples ocasiones, nos resulta sencillo comprar un cubrecamas para una cama matrimonial, aunque la nuestra sea individual, ¡qué más da!, decimos, todo radica en meter los extremos abajo del colchón o dejarlos colgar con total naturalidad. Y por supuesto que al principio no es visto como un error, hasta podemos acostumbrarnos, pero la verdad,  eso no quita que la cama se vea pequeña, desacomodada e incluso carezca de atractivo. Elige el cubrecamas de acuerdo al estilo y ambiente de la recámara, como el de la imagen, ¡que luce sensacional!

2. Qué las imágenes luzcan geniales

Que tal los posters de conciertos o hasta aquellos que incluyen las revistas, por supuesto que invitan a la inmediatez y por ello parecen incitarnos a pegarlos así, sin protección, marco, ni cristal, en las paredes de la habitación. Si eso te ha pasado o ha estado muy cerca de ocurrir, te avisamos que es un error garrafal para la decoraron de tu alcoba, así que evítalo a toda costa.

De pronto se piensa que si está en la pared, qué más da lo que tenga de protección, no está en constante uso, más que le meramente visual. Y desde allí comienza el desacierto ya que las paredes son una de las partes en un habitación, que más cuidados necesita tanto ella como los artículos colocados encima, puesto que, si divididos las partes estructurales de cualquier cuarto, las paredes representan cerca del 80%.

3. No sobrecargar los burós

Los burós, esos pequeñitos y siameses muebles que nos permiten tener lo necesario cerca de la cama, parecen ser toda utilidad. El problema, y de manera más concreta, el error que en esta lista tiene asignado con el número cuatro, es cuando queremos tener media recámara en esos muebles.

Medicamentos, iluminación, tecnología, agenda, libro. En fin, todo lo habido y por haber, hasta que su eficacia se toma en un caos que culmina con algo roto, perdido o sucio. Para evitar las posibilidades de caer en circunstancias así, realiza una reflexión de lo que es menester tener, y lo que salga sobrando, mejor asignarles lugares en repisas, mucho mejor si éstas están cerca de la cama como el diseño de Din Interiorismo.

4. La ropa en su lugar

Algo más antiestético que tener tu ropa limpia desordenada, es tener tu ropa sucia hecha un caos y por lo tanto haciendo de tu cuarto un caos todavía mayor. Dicho desorden hace que en muchas ocasiones todo esté encima de cama y demás muebles, incluso adentro del clóset, ¿el resultado? una mezcla de aromas nada agradables.

5. Ordena el escritorio y la mesa

Y seguimos con el desorden, sólo que esta vez en el escritorio. Aquí ocurre algo similar que en los burós, así que la solución es un tanto parecida, radica en que tengas sólo lo que allí uses; el resto de las cosas debes colocarlas en otro sitio, sólo así tendrás una comisión tan bella como la lograda por Buro Arquitectura.

6. Que la decoración coincida con el estilo

Y cerramos con aquellos regalos y demás detalles, los cuales queremos exhibirlos así como nos fueron dados, el detalle está en que muchas veces lejos de embellecer, nos afean la recámara, y es que lo que a nuestros ojos puede ser original, para muchos otros puede parecer que sobra.

Así que para llegar a un consenso estético lo mejor es guardas aquellos detalles o al menos darles una apariencia más sofisticada, con el fin de que parezcan un verdadero detalle decorativo.

Mira el trabajo de Seven Arquitectos y notarás originalidad mezclada con muy buen gusto.

7. Que en el armario haya suficiente espacio

Y qué decir de la ropa, un elemento indispensable en cualquier recámara, pero también uno de los que más desorden es capaz de crear, sólo deja sin acomodar tu ropa un par de días, y experimentaras un caos que querrás pedir ayuda a un acomoda-armarios, si existiera la profesión.

Para que no caigas en este fallo, es recomendable, que tu armario sea directamente proporcional a la cantidad de ropa que tienes, y que si sí lo es, no trates de meter todo en él, mejor instala otro en tu cuarto de baño o genera múltiple compartimentos, justo como lo hace aquí Co: Interior.

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